Descripción del curso

Las clases se plantean desde una perspectiva teórico-práctica.

– Práctica para, desde un primer momento, tener contacto con el instrumento y hacer las clases más amenas.
– Teórica, porque para que el alumno pueda avanzar es importante entender cómo funciona la música.

Se trabajará el obtener una técnica correcta, valiéndonos de una postura natural y relajada para evitar tensiones que, a la larga, puedan provocar que el alumnado no avancé lo que podría o, en el peor de los casos, pueda lesionarse.
Estudiaremos distintos estilos musicales desde el flamenco, funk, jazz, reggae… hasta el rock, entendiendo la importancia de ser la base rítmica de la canción.

Conoceremos diferentes tipos de compases y figuras rítmicas. También cómo se lee y escribe una partitura de batería, perdiendo así el miedo al lenguaje musical y facilitando la comunicación con el resto de músicos.

Podremos descubrir y analizar canciones con el fin de aprender otros tipos de música y no cerrarnos a lo establecido.
Desde el punto de vista más creativo, descubriremos la batería como un elemento de percusión en sí mismo, yendo más allá de los estereotipos sobre el instrumento a los que estamos acostumbrados.

Aprenderemos a escuchar lo que está pasando en la canción y a saber cuándo tocar y cuando no. Y usaremos los distintos timbres e intensidades de la batería, según nos interese, o nos pida la canción.

En definitiva, la intención final, es ser capaz de plasmar en el instrumento lo que tengamos en la cabeza.